Aunque a muchos usuarios aún les sigue resultando una sorpresa, Microsoft lleva bastante tiempo avisándonos que dejará de prestar soporte al longevo Windows XP. Tras más de 12 años de servicio, Microsoft dejará de soportar Windows XP a partir del 8 de abril y, por tanto, no podremos esperar actualizaciones del sistema operativo ni tampoco de productos como Microsoft Security Essentials. Si bien es cierto que Microsoft espera una migración a Windows 8, la realidad es que los procesos de migración suelen ser lentos y costosos dentro de las empresas, no todo el mundo está en disposición de actualizar su hardware y, además, Windows 8 no es la única opción a considerar. Dicho de otra forma, cuando llegue el 8 de abril es de esperar que aún siga existiendo una importante planta de PCs con Windows XP instalado porque, a día de hoy, sigue siendo el segundo sistema operativo más utilizado por los usuarios.
Microsoft es más que consciente de que, a pesar del anuncio de final de soporte, el 8 de abril seguirá usándose Windows XP en muchos equipos; de hecho, Windows XP seguirá siendo utilizado por los usuarios durante bastante tiempo a pesar de todo. Con esta realidad asumida, los de Redmond han decidido no cerrar del todo las puertas a Windows XP y proporcionarán soporte con los habituales parches antimalware; es decir, las herramientas que buscan y eliminan código malicioso de nuestro equipo (y que habitualmente recibíamos dentro de las actualizaciones periódicas).
Esta pequeña moratoria que persigue no dejar tan solos a los usuarios de Windows XP se mantendrá hasta el 14 de julio de 2015 y su propósito no es más que ofrecer un pequeño colchón que permita a usuarios y empresas migrar sus equipos con algo más de tiempo (si aún no empezaron el proceso de migración hacia otro sistema operativo).
Evidentemente, los parches antimalware no pueden considerarse una extensión del soporte de XP; Microsoft deja bastante claro este aspecto, considera la fecha del 8 de abril como algo inamovible y recomienda a los usuarios no quedarse en un sistema operativo obsoleto. Desde la perspectiva de Microsoft, no migrar no es una opción aunque se utilice un buen antivirus y, en mi opinión, creo que es importante no quedarse estancado en un sistema operativo obsoleto porque, poco a poco, dejaremos de recibir actualizaciones y soporte de las aplicaciones que usamos.